En 2025 las comisiones bancarias siguen siendo un gasto importante para muchas personas, pero con algunos trucos es posible reducirlas o evitarlas. Aquí tienes consejos efectivos:
- Cumple requisitos de exención. Muchos bancos ofrecen cuentas sin comisiones si cumples ciertas condiciones: domiciliar la nómina, recibir pensión, o mantener un saldo mínimo mensual. Averigua qué pide tu entidad para “eximir” las comisiones de mantenimiento. Por ejemplo, domiciliando al menos una cantidad mínima de ingresos al mes pueden liberar la comisión de administración. Lee atentamente tu contrato y exige el alta gratuita si cumples esos requisitos.
- Utiliza cajeros de tu red. Para evitar comisiones en retiradas, saca efectivo solo en los cajeros de tu propio banco o de su red de asociados. Sacar dinero en cajeros de otras entidades suele generar una comisión fija (por ejemplo, 2–3 €) y puede sumar mucho a fin de año. Si no encuentras cajero propio, planifica la retirada de dinero en viajes o compras para minimizar el número de veces.
- Evita descubiertos. Mantén un colchón mínimo en tu cuenta para evitar sobregiros. Los cargos por descubierto son de los más caros (pueden llegar a un 20% TAE en lo impagado). Activa alertas de saldo bajo en la banca online o app para no quedarte en números rojos. Algunas entidades ofrecen “protección de descubierto” automática: si tu saldo baja, se mueve un dinero de una cuenta vinculada para cubrirlo, eliminando la comisión. Evítala si no la necesitas, o no entrar en descubierto para no activar intereses de demora.
- Cuidado con las transacciones internacionales. Si viajas o compras fuera de zona euro, revisa los costes por cambio de divisa. Muchas tarjetas tradicionales cobran un 2–3% por cada operación en moneda extranjera o retirada en cajero fuera del área. Algunas tarjetas específicas (VISA o MasterCard de intercambio cero, o tarjetas prepago como Wise, Revolut) no cobran nada por estos cambios. Valora tener al menos una tarjeta de este tipo para viajes o compras online en dólares, libras, etc. Esto te ahorrará comisiones ocultas de conversión.
- Bancos online y neobancos. La gran ventaja de los bancos digitales es que suelen no cobrar comisiones por cuentas corrientes básicas. Al carecer de oficinas físicas, sus gastos operativos son menores y trasladan ese ahorro al cliente. Considera abrirte una cuenta en entidades como N26, Revolut, Bnext, ING (Cuenta Nómina Online) u otros bancos digitales que tienen ofertas sin comisiones. En 2025 destaca que muchos ofrecen incluso remuneración por saldo. Cambiarte a uno de estos bancos puede ser la forma más directa de librarte de comisiones de mantenimiento.
- Negocia con tu banco actual. Si tienes una relación larga (varios años con nómina, préstamos o inversiones allí), pide hablar con tu gestor para revisar comisiones. Algunos bancos bajan o eliminan tarifas si ven que podrías irte. Como recomienda Rankia, una simple conversación puede ahorrarte dinero. Menciona la posibilidad de cambiar de banco si no hay acuerdo: a veces la amenaza de irte basta para conseguir exenciones o una rebaja del coste de tarjeta.
- Compara antes de comprometerte. Usa comparadores en línea (HelpMyCash, Kelisto, Rankia) para ver qué bancos ofrecen cuentas sin comisión ni compromiso. Puedes cambiar de banco con relativa facilidad (solo debes notificar a quienes te pagan ingresos regulares). Al cambiar, valora también otros beneficios que ofrecen (regalos de bienvenida, programas de puntos, app intuitiva).
- Revisa regularmente tu factura bancaria. Cada pocos meses revisa en tu extracto qué comisiones te han cobrado (mantenimiento, transferencias, tarjetas, cajero). Asegúrate de que coincide con lo pactado (p.ej. que la nómina domiciliada esté activa y aplicando la exención). Si ves un cargo inesperado, reclama en Atención al Cliente. A veces hay errores o te pueden reclamar la razón para eximirla.
Con estas acciones, podrás minimizar o eliminar muchas comisiones: cuentas sin mantenimiento, tarjetas sin cuotas anuales, transferencias gratis en los mismos bancos, etc. En 2025 hay multitud de opciones gratuitas, especialmente los bancos online. Procura usar solo los servicios por los que realmente valga la pena pagar, y nunca toleres cargos “ocultos” sin investigarlos. Al final, ahorrar en comisiones es “poner dinero en tu bolsillo” cada mes.
